El Centro Cultural Biblioteca Ecuatoriana Aurelio Espinosa Pólit y la Fundación Iglesia de la Compañía de Jesús anuncian a la Provincia la exposición: “Todo el corazón vertido. Cultura, ciencia y evangelización de los jesuitas quiteños” por los 250 años de supresión de la Compañía de Jesús.
Este evento que resalta la entrega y sacrificio de los jesuitas quiteños por su patria en tiempos de máxima exigencia a su vocación se inauguró el 30 de septiembre y acogerá a los visitantes hasta el 16 de diciembre.
La exposición esta dividida en tres períodos claves de la historia de la Provincia de Quito y Compañía universal. El primero, titulado “Obra y misión” abarca buena parte del siglo XVII hasta mediados del siglo XVIII. Donde se exhibe la inmensa tarea apostólica desarrollada por los jesuitas quiteños en universidades, colegios, evangelización, espiritualidad, ciencia, cultura y misiones de Maynas.
El segundo período titulado “Fidelidad creativa en el destierro” presenta la labor de la Compañía de Jesús en medio de calumnias y persecuciones que desembocaron en las expulsiones de Brasil, Portugal, Francia y los dominios de la corona española en América, Filipinas y península ibérica en 1767 hasta el último sacrificio de la orden con la injusta supresión ocurrida en agosto de 1773. Poniendo especial atención al extrañamiento de los jesuitas quiteños gracias a los diarios que escribieron camino al exilio de los estados pontificios.
El tercer y último período titulado “Ocaso y renacimiento” expone la admirable tarea que los jesuitas quiteños lograron realizar en las más duras condiciones.
Figuras como Juan de Velasco, Francisco Javier Veigl y otros más descuellan por su labor en la historia y cartografía junto a otros antiguos compañeros de orden y tribulaciones.
Invitamos a superiores de comunidades y directores de obras que motiven a sus miembros y colaboradores a visitar la exposición, así como al público en general, para de esta manera, brindar un justo homenaje a estos insignes jesuitas que vertieron todo su corazón por la mayor gloria de Dios y bien de sus prójimos en tiempos complejos.