Por: Erick Peralvo A.
Carrera de Historia
Pontificia Universidad Católica del Ecuador
Como parte de la memoria colectiva de un pueblo, se recuerda la crisis económica, política y social, que obligó a miles de ecuatorianos a buscar en otros países nuevas oportunidades laborales y mejores condiciones de vida para sus familias. Los años noventa fueron una época de alta convulsión social, en el marco de un proyecto neoliberal agotado, se produjeron diversas marchas y movilizaciones en contra de las reformas económicas adoptadas en la época.
Ya desde finales de los 70, el sucre entró en un proceso de constante devaluación debido al fluctuante precio del petróleo y al sobre endeudamiento de la banca nacional. La sucretización de la deuda privada en el año 82, junto con la liberalización de la banca en el 94, fueron el inicio de la crisis económica que en menos de veinte años llevó a la dolarización del año 2000. Por diarios y noticieros circulaban imágenes de adultos mayores, trabajadores y estudiantes que en las calles protestaban por la pérdida de todo su dinero a causa del feriado bancario, y por lo que, en menos de dos años, cerca del 4% de ecuatorianos debieron salir del país (Gratton, 2005).
Para el año 95 la crisis nacional se agudizó, el conflicto limítrofe con el Perú, que llevaba más de cuarenta años como herida abierta estalló en la recordada Guerra del Cenepa. El desempleo era del 7%, llegando a su pico en el año 99 con el 15 % de la población sin una actividad económica fija (Tomalá, 2016). La migración respondió a un proceso social de segregación poblacional que concentró a una pujante clase media en las principales ciudades del país. La pobreza creció en las urbes donde este grupo asalariado evidenció un notable decrecimiento en el nivel de vida principalmente de aquellos que provenían de plazas laborales en el sector privado. En este periodo se evidenció un cambio respecto al destino migratorio de los ecuatorianos. Hasta el año 95 los Estados Unidos se presentaban como el principal objetivo de la masa migrante; lo que cambió en el periodo (98 – 00) debido a regularizaciones adoptadas en políticas exteriores (Gratton, 2005). Esto produjo que se apunte a España como el nuevo favorito de los miles de desplazaos, ya que hasta el 2003, los ecuatorianos no necesitaban visa para ingresar al país. Atraídos por promesas de mejores remuneraciones, y más oportunidades, cerca de 560,000 mil fueron los migrantes que en este periodo dejaron todo atrás en búsqueda de una vida digna.
Referencias Bibliográficas.
Acosta, A. (1994). Los nombres de la deuda: sucretizadores, canjeadores y tenedores . Quito: FONDAD .
Gratton, B. (2005). Ecuador en la historia de la migración internacional ¿Modelo o aberración? En G. Herrea, M. Carrillo, & A.
Torres, El proceso migratorio en el Ecuador después de la crisis económica-financiera de 1998-1999. Un análisis histórico descriptivo (págs. 31- 56). Quito: Flacso.
Tomalá, M. (2016). El proceso migratorio en el Ecuador después de la crisis económica-financiera de 1998-1999. Un análisis histórico descriptivo. Internacional Conference on Global Science , 1 - 26.